ALTAS TORRES

La crisis nos angustia. El mercado del trabajo no puede estar peor. Las oportunidades y posibilidades parecen no existir. Pero están ahí, y quien tiene visión y ánimo, logrará sobreponerse a los problemas y salir adelante. Esta forma de ver las cosas es en parte la de El Torres, un andaluz vinculado con los cómics desde hace ya muchos años, que ha conocido el cielo y el infierno en este negocio. El Torres fue fanzinista, guionista de neófitos, redactor jolgorioso, editor con más ganas que experiencia, guionista de géneros tan poco apreciados como la fantasía heroica o el porno, director editorial de líneas subterráneas y director de talleres o estudios de trabajo, como el llamado Malaka Studio.

Desde allí, desde hace unos años, El Torres nos está dando buenas lecciones a todos. Ha hecho convenientemente sus deberes y ha parido varias obras de cómic que reúnen dos elementos que cuesta mucho poner en común: calidad y comercialidad. Sus guiones para series como Nancy in Hell, CVO, El velo, El bosque de los suicidas no dejan lugar a dudas de que es un excelente guionista de lo fantástico. Sus ventas lo avalan y las menciones y críticas lo confirman. Lo malo es que son obras de género y el aplauso unánime ya saben todos que van por otras lindes. Con todo, El Torres también ha demostrado, y muy humildemente por cierto, que sabe moverse en otras aguas y con otro tipo de relatos. Busquen sus huellas en La huella de Lorca si no me creen.

Además, El Torres es puro magisterio. Tiene o cree tener muchas claves, conoce algunas estrategias y sin duda puede dar muchos consejos. La cita que nos propone la organización de las III Jornadas de Encuentro con Autores Carmona en Viñetas (domingo de 18:15 a 19:15) es ineludible en ese caso.

EL TORRES